La mandarina

 

Los productos cítricos comprenden cuatro grandes familias: limones, pomelos, naranjas y mandarinas. La dispersión de los cítricos desde sus lugares de origen se debió fundamentalmente a los grandes movimientos migratorios: conquistas de Alejandro Magno, expansión del Islam, cruzadas, descubrimiento de América, etc.

Las mandarinas (Rutaceae Aurantioidea Citrus), como todos los cítricos, se originaron hace unos 20 millones de años en el sudeste asiático. Desde entonces. las mandarinas han sufrido numerosas modificaciones debidas a la selección natural y a hibridaciones, tanto naturales como producidas por el hombre. Proveniente de Conchinchina, de donde pasó a China, el nombre de mandarina lo debió de poner algún dignatario chino, en alusión a su color, que era semejante al traje que llevaban los mandarines, los altos gobernantes de aquel país.

Su composición es bastante similar a la de las naranjas, pero posee mayor contenido hídrico y menor proporción de hidratos de carbono. Su consumo aporta pocas calorías.

La mandarina es rica en fibra, vitaminas A, B1, B2, B3, B6 y C, además de un aporte considerable de minerales, como el fósforo, calcio, hierro y magnesio. La mandarina, al igual que la naranja, puede ayudar a combatir los resfriados. Es igualmente aconsejable para las personas que padecen debilidad cardiaca o que desean fortalecer sus vasos sanguíneos.



La mandarina tiene forma casi esférica, corteza lisa, o algo rugosa, y un dulce sabor ligeramente ácido. Destaca su contenido en bromo, un componente conciliador del sueño, lo que la hace un postre muy adecuado para la cena. Posee de ocho a doce gajos, con un sabroso jugo y piel muy suelta, por lo que resulta fácil y cómodo pelarla. Su piel debe ser blanda pero no arrugada y estar bien adherida a los gajos del interior. Si resulta muy pesada para su tamaño, es posible que resulte muy jugosa.

Se suelen consumir generalmente frescas, aunque se pueden incorporar a salsas agridulces que acompañan a platos de caza y cerdo. También se pueden aplicar a mariscos, ensaladas de arroz y pollo. Zumos, mermeladas y confituras son también productos que se pueden elaborar con esta deliciosa y fina fruta. Su corteza, rallada en tiritas se suele utilizar para aromatizar los platos.

Esta fruta ha sido siempre ensalzada por su aporte vitamínico, su sabor y su importancia en la cocina. Como es costumbre os ofrecemos una serie de recetas que llevan mandarina, como la babarroa de mandarinas, el conejo con mandarinas, las endivias con mandarina, el pollo con cortezas de mandarina o el postre de mandarinas.

Enlaces relacionados:
La mandarina
Reportajes anteriores

Puedes consultar los reportajes anteriores por categorías o bien utilizando el buscador de palabras clave.

© Copyright - Revistarecetas.Com | Condiciones Generales y Polнtica de Privacidad | Rss

Desarrollado por Iniciativas Virtuales