El café

 

La planta del café es originaria de África. Pertenece a la familia de las rubiáceas, y al género "Coffea", que comprende unas 70 especies, de las que sólo 10 son interesantes para la producción de café. Sus frutos son redondos, suaves, levemente agrios, color achocolatado, de corteza lisa, e intenso perfume. Todas las variedades son propias, en sentido agrícola, de climas tropicales, los que dominan las zonas del mundo sitas entre los trópicos de Cáncer y de Capricornio. 

Su descubrimiento ocurrió hace más de 1.000 años, en el corazón del Yemen, sobre el monte Chemer, un rebaño de cabras pertenecientes a un convento triscaban libremente entre los débiles arbustos, suficientemente fuertes para crecer incluso en un suelo volcánico y cubierto de lava. Después de algunos días, este rebaño parecía haber perdido el sueño: durante la noche en lugar de dormir, las cabras se perseguían sin cesar y no paraban de balar a la luna.

El café es originario de Abisinia desde donde se extendió su cultivo por Arabia y el resto de oriente medio. Tenemos testimonios de su consumo desde el siglo VIII, que se utilizaba como alimento, después como bebida fermentada, más tarde como medicina y finalmente como infusión. Llegó a Europa en el siglo XVI por mercaderes venecianos. Los holandeses lo introdujeron en las colonias de América del Sur, Guayana, Colombia y las Antillas. Posteriormente llegó al Caribe y Brasil.

América es por su climatología y orografía, donde la semilla del café encontró el lugar más idóneo para su cultivo. Hoy día, Brasil y Colombia son los mayores productores de café. La recolección de los granos de café es un proceso largo y minucioso. Primero han de madurar las cerezas hasta que alcancen un color rojizo. Los recolectores repasan los cafetos y recolectan una a una las cerezas maduras. Así el proceso se alarga hasta que todos los frutos maduran completamente.

Lo cierto es que el café se viene bebiendo desde hace siglos, siendo la bebida "despertadora" por excelencia: estimulante natural tanto física como psíquicamente, fuente de socialización y remate gastronómico casi obligado. El resultado es un líquido más o menos oscuro, dotado de cierta sustancia llamada cafeína. La cafeína es un estimulante suave, cuyas interacciones en el organismo humano se deben a su peculiar forma química, correspondiente a una metilxantina, igual que en los casos del te y del chocolate.

Como es habitual queremos ofreceros una serie de recetas donde el café es protagonista, como el flan de café, el pollo Strogonoff al café, el licor de café, la tarta helada de chocolate y café o la mouse de café y queso.

Enlaces relacionados:
El café
Reportajes anteriores

Puedes consultar los reportajes anteriores por categorías o bien utilizando el buscador de palabras clave.

© Copyright - Revistarecetas.Com | Condiciones Generales y Polнtica de Privacidad | Rss

Desarrollado por Iniciativas Virtuales