La Menta se toma desde antiguo por su refrescante sabor y sus cualidades para despejar las vías respiratorias. Esta hierba procede de Asia Central y del Mediterráneo. El nombre menta (Mentha piperita) aparece ya en los papiros de los herbolarios egipcios, donde ya eran alabadas sus virtudes, entre ellas su sabor y su aroma que es fuerte, fresco, dulzón, picante y refrescante.

Lo más destacable de la menta es su olor, que la hace reconocible y fácil de encontrar.
La Menta puede alcanzar un metro de altura y tiene largos tallos, sin ramas, de los que salen hojas lisas y brillantes con bordes irregulares. En verano brotan pequeñas flores. Para la infusión se pueden usar las hojas y las flores.

En las aplicaciones culinarias es una hierba deliciosa para tomar en infusión y aromatizar vinagres y aceites. Utilízala en ensaladas, sobre todo de tomate. Las hojas frescas añaden sabor a platos de patatas, sopas y postres. Es una planta típica en la cocina inglesa, en platos de caza y cordero. Combina muy bien con otras hierbas, en la cocina, como son la albahaca, el eneldo, el perejil y en Asía con el jengibre, el comino, el cardamomo, el clavos de olor. Otra variedad de menta, la hierbabuena, es muy utilizada en la cocina andaluza para sopas y otros platos. En los postres casa muy bien con el chocolate, las frutas y los helados.

Su olor indica sus virtudes tónicas y estimulantes. Es energética. No debe tomarse de noche porque produce insomnio (causas del insomnio). Se puede utilizar tanto fresca como seca.
La meta se debe utilizar cautelosamente con los niños. Debe ser evitado por personas con ardor crónico.

Sus propiedades: digestiva, es buena para el mal aliento, inflamaciones gingivitis, contra las náuseas, espasmos intestinales. Se hacen inhalaciones para combatir el catarro, algunas bronquitis y laringitis, por su efecto antiinflamatorio. Muchas pomadas y ungüentos poseen en su composición mentol, así como pastas dentífricas, caramelos y dulces. La meta ayuda y facilita las digestiones, elimina los gases y flatulencias, alivia la acidez estomacal, disminuye los dolores y convulsiones y combate los mareos y náuseas. Su aroma fuerte despeja las vías respiratorias, por lo que resulta adecuada para los resfriados y problemas pulmonares. El aceite esencial es utilizado profusamente en farmacología, fabricación de pastas dentífricas, caramelos, chicles y en licorería.

Como es habitual os ofrecemos una serie de recetas para ilustrar el contenido como pueden se la Mouse de cranberries y pistachos con mil de menta., el bacalao confitado a la menta o la ensalada de hinojos con naranja y menta.